Sunday, January 11, 2009

Y me miro en el espejo despacito




Pues eso. Búscome, pequeña y valiente. Desde más allá de mi punto de partida. Sin más que un pequeño planeta y mi rosa.

Hay tanto que decir que al final, por falta de aire, no existe más. Instantes auténticos que se pierden porque no los capta nadie mas que alguien que no se encuentra, que los ve, los siente, se difuminan y se van. Memorias de loco aislado. Y hablas sin saber lo que dices, porque estas acostumbrada a hablar igual que eres, y lo que eres ahora se desliza por la superficie de alguna atracción metálica que no dura mas de 40 segundos, una y otra vez. Eres todo, puedes serlo todo porque lo alcanzas, y no eres nada. Todas las vigas que hacian crecer hacia arriba a tus andamios creativos se han suicidado elgiendo el papel de actores secundarios en plena huelga de guionistas. Hoy, tu protagonista es este agarre pequeño, mañana será aquel efímero y pasado solo necesitarás poder dejar de tener que agarrarte por unos instantes, no caerte si te sueltas. Volver a tener todo tan claro como un cuadro en blanco a punto de ser provocado por mil pinceles suaves que dejarán la impronta de un ser a compartir irrevocablemente auténtico.

Raquíticos nuevos ciclos se dibujan mientras corre el reloj de arena en círculos, hacia ninguna parte. Es un hecho certero que la nieve se deshace y el sol se dispara, pero el muy canalla jamás te alcanza nunca con su bala amarilla. Balas amarillas. Hay fibras, como esas balas amarillas, que un dia cualquiera, sin que te lo esperes, te alcanzan, se meten en tu cuerpo y te buscan por los recobecos que tenemos dentro, no paran hasta encontrarte y una vez frente a tu mirada, te apresan en un instante. Son las que te recuerdan dónde estás, quién eres, lo que llevas por dentro. Las que te encuentran cuando te buscas perdida. Son las líneas que te delimitan para que, por fin, empieces a Existir. Para que no se escape el aire más y desaparezca. Para que sepas que no estas loco, que no son cosas tuyas y que los instantes auténticos, son de verdad.

8 comments:

Anonymous said...

hola beatrize, solo decirte que tienes un blog muy interesante y me gustaria poder contactar contigo.Estoy descubriendo a Kundera, imagínate...
Un saludo

claradriel said...

Yo las llamo los hilos dorados que nos unen a todo lo que nos da sentido y amamos... los asideros de nuestra realidad, que con suaves tironcitos, nos recuerdan que tenemos dónde mirar.

Besos, dulce Poulain.
Escribes muy bien.

[..La chica triste que te hacía reír..] said...

Sin duda todo el mundo estamos necesitados de que esas fibras se nos cuelen dentro más a menudo..!

Anonymous said...

& pasamos media vida buscandonos, perdiendonos, no solo uno mismo sino los amigos, las ciudades, los sentimientos, los amores quien sabe aveces tenemos cosas que vamos acumulando y luego no sabemos que hacer con ellos y luego lo vamos perdiendo....

Anonymous said...

te descubrí una noche mágica llena de másica, amor y felicidad. con tu larga melena, escondiendo tus ojos tristes, pero enmarcando tu sonrisa inagotable; mientras mirabas fijamente hacia nosotros con una expresión de alegría sincera.
y en pocos segundos, ahí, en la oscuridad, te cogí cariño.
hoy todos mis andamios se han suicidado, y me doy cuenta de que la felicidad no estaba hecha para mí.
creo que tú y yo hubieramos sido muy buenos amigos, pero bueno, qué vamos a hacer? así es la vida.
de todas formas, qué bien escribes!!! seguiré leyendo tu blog porque en cierta manera, me llena en estos momentos difíciles.
no tienes ni idea de quien soy, lo sé, pero no hace falta, jeje...
desde mi infierno, siempre sabré que el arquitecto del cielo pensó en madrid al construirlo...
da igual...
son estupideces de un loco que recuerda...
de todas formas,......cuidamelo, por favor...

Kiukara said...

Hola wapa! Me ha gustado mucho esto que has escrito... Debe ser porque últimamente me encuentro un poco así, buscándo-me.

A ver si nos alcanza una bala amarilla ;-)


besitos!

Anonymous said...

hace dos noches pensaba que había alguna posibilidad de levantarme, que al final sería alcanzado por una de esas balas amarillas tan codiciadas de las que hablas.
te dije que mis andamios se habían suicidado desde la noche que te conocí en aquel bar.
pero lo que no sabía es q habían sido asesinados.
hoy no tengo esperanza.
hoy no veo salida.
hoy me siento sin fuerzas para quererme lo más mínimo.
se acabó, me rindo.
mi corazón se ha helado, pero mis lágrimas no se acaban aún cuando finjo sonreir.
de todas formas, no temas, no haré ninguna estupidez autoagresiva(soy más inteligente que todo eso). sé que algún día, aún con la certeza de que jamás volveré a sentir nada, ni bueno, ni malo; esto que ahora me mata, dejará de doler.
siento utilizar tu blog como paño de lágrimas de este estúpido que un día se creyó ese cuento que llaman amor, pero creo que tú me entenderás...
desde aquí, mi anonimato, sin saber a ciencia cierta quién soy (aunque puedas tener tus sospechas),le pido a Dios, Alá, o quien coño proceda, que por favor le borre de mi memoria y me saque de este pozo sin fondo.
POR FAVOR, ESTOY PIDIENDO A GRITOS UNA BALA AMARILLA ENTRE CEJA Y CEJA!!!!

Carmen said...

ten cuidado con esta canción, que llegas a creer que no te encuentras... y fíjate lo cerca que te tienes.